Estamos hartos de escuchar sobre cómo canalizar, ser un canal pero ¿cómo lograr ser un “buen” canal?.
Sabemos que todo el mundo, -sin excepción- es capaz de canalizar. Para comenzar, ¿qué es canalizar? Significa conectarse con la “Fuente” (llámale Dios, Divinidad, tu Yo Superior, la esencia divina, tus guías personales o Maestros Ascendidos). Es decir, significa hacer de canal, de instrumento, de tubería, permitir que información que está en otro plano (planos superiores, sopa cuántica etc…) llegue a nosotros aquí y ahora, en el momento que lo precisamos. Hay maneras diversas de conectarse y canalizar pero hoy quiero hablar de cómo ser un buen canal. ¿Qué diferencia una lectura de Registros Akáshicos de otra? ¿Por qué nadie canaliza igual? Es muy probable que haya personas a las que la información les llegue muy clara, de forma muy contundente. A otras personas, sin embargo, la información que les llegue será errónea. ¿Por qué? Porque es nuestra responsabilidad que el canal esté limpio y para ello necesitamos seguir ciertas pautas.
Las principales podrían ser:
- Llevar una vida sana, saludable, ordenada y metódica.
- Que la alimentación sea la más adecuada y sana posible (con alimentos crudos verdes, cereales, legumbres…). No tomar comida procesada, azúcares o bollería industrial. Evitar carnes rojas.
- Hidratarse bien, beber mucha agua.
- Dormir las horas necesarias, descansar lo suficiente.
- Hacer ejercicio físico, actividades al aire libre.
- Tomar el sol, recargarse con energía solar.
- Aprender a respirar, hacer ciclos de respiraciones.
- Estar en contacto con la naturaleza. Enraizarse, andar descalzo, estar en zonas verdes o el mar.
- Tener pensamientos positivos, pensarlos, decirlos o actuar con respecto a esos pensamientos.
- Estar en lugares con energías limpias (rechazar aglomeraciones, lugares conflictivos…).
- Rodearse de personas positivas y no problemáticas.
- No tener adicciones (sea beber alcohol, drogas, fumar…).
- Practicar técnicas o terapias energéticas para armonizar y equilibrar tu sistema energético.
- “Mens sana in corpore sano”.
Es decir, si somos una tubería y ésta está llena de óxido, está rajada, con agujeros y tuviéramos que llevar agua, ésta no sería potable o se perdería la mitad del caudal por el camino. Pues es lo mismo si llevas agua, energía universal, imágenes, palabras o sensaciones.
Nuestro deber si canalizamos (sea Reiki, Registros Akáshicos…) es que nuestro canal sea, -en la medida de lo posible-, lo más fiable posible, esté lo más limpio que podamos.
Para ello deberíamos de rechazar: canalizar sin haber dormido, tras haber ingerido alcohol o tras un día agotador, después de una comida muy copiosa, si nos encontramos con poca energía o enfermos. Deberíamos de evitar: tener pensamientos negativos, hábitos poco saludables, ir con personas muy tóxicas, rechazar cualquier adicción, llevar una vida caótica y desordenada, alimentarnos de forma inadecuada... es decir, lo contrario al listado anteriormente citado.